Las emociones.

En Reiki se utilizan básicamente, de forma simultanea, dos métodos para sanar las emociones y la conducta.

Método psicológico:
 
Centrado en los preceptos Reiki, son un guión para enfocar nuestra conducta de forma habitual y conseguir una situación de paz y de armonía.

-Solo por hoy, no estés enojado.
-Solo por hoy, no te preocupes.
-Honra a tus padres, profesores y ancianos.
-Gana tu pan honestamente.
-Siente gratitud por todo lo vivo.

Método emocional:

El trabajo de autotratamiento energético nos permite sanar nuestro organismo en su totalidad.

Veamos cómo ocurre esta sanación emocional.

Nuestros pensamientos, emociones, sensaciones, percepciones, etc., tienen como soporte básico la energía (campos electromagnéticos), formando paquetes de información electromagnética.

Estos paquetes de energía, guardan dentro de si la información con diferentes frecuencias (al igual que ocurre con un receptor de radio, en el que podemos sintonizar en su dial diferentes emisoras de radio en las "frecuencias" en las que emiten), nosotros guardamos todo en nuestro ser con la frecuencia energética que la recibimos o emitimos.

El amor tiene una frecuencia de funcionamiento muy elevada, el miedo tiene una frecuencia de funcionamiento baja, y todas las demás emociones utilizan frecuencias intermedias entre el amor y el miedo.
 
Reiki nos permite acceder de forma muy rápida a una energía de una vibración muy elevada, muy amorosa, que cuando nos lo aplicamos a nosotros mismos quema energías de vibración más baja, produciéndose un efecto sanador, tanto físicamente, como emocionalmente, y facilitando por tanto una mayor sensibilidad y conexión espiritual.

 

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