Pensamientos.
Todos a lo largo del día creamos o recibimos pensamientos
de todo tipo.
En nuestras conversaciones tanto con nosotros mismos como con otras
personas aparecen todo tipo de ideas, palabras, sensaciones.
Discernir que es lo que nos viene bien de todo lo que
creamos y también de todo lo que recibimos es bastante sencillo, ya
que tan solo tenemos que observarnos a nosotros mismos para
percibir la reacción emocional que esos estímulos nos generan en
nosotros mismos.
Cuando percibimos en nosotros mismos que un pensamiento nos
produce una reacción emocional de paz, armonía, felicidad, estamos
en el camino correcto.
Cuando no percibimos emocionalmente paz, armonía, felicidad,
simplemente estamos en otro camino que finalmente nos mostrará que
eso que estamos pensando no es el camino adecuado para nuestra
realización espiritual, y cuando nos demos cuenta de ello,
simplemente abandonaremos ese camino para seguir otro, que si nos
produce paz, armonía, felicidad, será un camino correcto, y si no lo
hace, cuando nos demos cuenta nuevamente, simplemente abandonaremos
ese nuevo camino para seguir otro.......
¿Qué puedo hacer para conseguir controlar mis pensamientos de forma
que generen paz, armonía, felicidad?
Los pensamientos difícilmente se pueden controlar
combatiéndolos, es decir peleándote con ellos, o se les presta
atención (y por tanto les facilitas energía) que los hace más
presentes, o no les prestas atención (y por tanto no les facilitas
energía) y su presencia es efímera, por falta del combustible
esencial para existir, la energía que les proporcionamos cuando les
prestamos atención.
Es imprescindible desarrollar una sensibilidad interna que nos
permita percibir nuestra reacción emocional, a cualquier tipo de
estímulo, cuando ésta se está produciendo, de forma que no nos
dejemos arrastrar por ella en el caso de que no nos aporte nada
constructivo.